sábado, septiembre 12, 2009
Abriendo puertas
Miedo...tengo miedo
Miedo...de quererte.
(dice la canción)
El amor cuando se está gestando, cuando empieza a desarrollarse, cuando te dá las primeras señales de que se quiere hospedar en tí, nos despierta miedos y temores.
Por suerte o por desgracia nuestro cerebro tiene memória del dolor que le causó el corazón en ocasiones anteriores. Es un sistema de autoprotección que nos crea dudas, nos entorpece, incluso a veces nos paraliza y nos hace desistir, "EXIT".
Debe ser normal, a nadie le apetece que le rompan su corazoncito y pasar otra vez por los violines rotos, el todo es una mierda me quiero morir y hechar mano del tópico: todos/as son iguales.
De todos modos ese miedo debemos verlo y afrontarlo como una prueba que nos puede llevar hasta la próxima puerta, al abrirla, el vestíbulo pequeño nos mostrará otras dos puertas. Una dice: enhorabuena, ahora toca intercambiar flúidos a ver que tal os llevaís cuerpo a cuerpo, la otra dice "EXIT" me caes muy bien per sólo te quiero como amigo/a.
Si pasas la prueba de los flúidos con éxito, aquí es dónde parece que te hayan metido un "chute que lo flipas" y empieza un período mágico, irreal, eufórico, caduco, idílico y con reacciones adversas.
Después se pone a prueba la "habilidad" de la pareja para poder pasar esa puerta y no dejar que el fantasma de la rutina les haga sombra. Creatividad, ingénio, ilusión, dedicación, trabajo en pareja, comunicación, esfuezo, comprensión y mucho...mucho amor!
En fín, que os diré que no sepais ya.
Miedo...de quererte.
(dice la canción)
El amor cuando se está gestando, cuando empieza a desarrollarse, cuando te dá las primeras señales de que se quiere hospedar en tí, nos despierta miedos y temores.
Por suerte o por desgracia nuestro cerebro tiene memória del dolor que le causó el corazón en ocasiones anteriores. Es un sistema de autoprotección que nos crea dudas, nos entorpece, incluso a veces nos paraliza y nos hace desistir, "EXIT".
Debe ser normal, a nadie le apetece que le rompan su corazoncito y pasar otra vez por los violines rotos, el todo es una mierda me quiero morir y hechar mano del tópico: todos/as son iguales.
De todos modos ese miedo debemos verlo y afrontarlo como una prueba que nos puede llevar hasta la próxima puerta, al abrirla, el vestíbulo pequeño nos mostrará otras dos puertas. Una dice: enhorabuena, ahora toca intercambiar flúidos a ver que tal os llevaís cuerpo a cuerpo, la otra dice "EXIT" me caes muy bien per sólo te quiero como amigo/a.
Si pasas la prueba de los flúidos con éxito, aquí es dónde parece que te hayan metido un "chute que lo flipas" y empieza un período mágico, irreal, eufórico, caduco, idílico y con reacciones adversas.
Después se pone a prueba la "habilidad" de la pareja para poder pasar esa puerta y no dejar que el fantasma de la rutina les haga sombra. Creatividad, ingénio, ilusión, dedicación, trabajo en pareja, comunicación, esfuezo, comprensión y mucho...mucho amor!
En fín, que os diré que no sepais ya.
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